sábado, 3 de febrero de 2007

La realidad sana

Toda una semana sin leer periódicos ni opiniones por culpa de la gripe estomacal. Llega el viernes, notas el cuerpo mejor y decides regresar a la navegación informativa. Para qué...

El Carnaval de nuevo a un tris de no celebrarse, pero eso no es lo peor. Mientras el abogado de los demandantes (encantado de convocar conferencias de prensa, este año con el pelo más corto, por cierto) amenaza con que el Carnaval deberá largarse del centro gracias a que por fin somos una sociedad acomodada y atontolinada, el Ayuntamiento maniobra de otra manera. Sí, ya lo intentó el año pasado y volverá a hacerlo este febrero: el Carnaval que quiere el Ayuntamiento es un Carnaval controlado, sin ruidos, sin basura, sin pis, sin nadie en la calle después de las seis de la mañana (y luego serán las cinco y media, y luego las cinco, y así). El Carnaval de un concejal de Seguridad metido a concejal de Fiestas. El Carnaval de sí pero no, de música pero bajita, de poco rudio y mucha policía. En fin, que definitivamente la fiesta se va al garete. Se está yendo por una cuestión generacional: nosotros, las generación del baby boom, la que engrosa la pirámide de población, ya casi no sale. La generación que viene después es más escasa y tiene otra manera de divertirse. Ni hará el bulto de las grandes noches del Carnaval de los primeros noventa, ni tiene esos parámetros de vacilón colectivo y conversación graciosa con los desconocidos. El pasado sábado de piñata me quedó una sensación agria: había muchísima gente de nuevo, pero eran todo pibes con cara de aburrimiento y poco vacilón sano. No son recuerdos del abuelo cebolleta, es lo que vi y viví. Y así el Carnaval se está yendo a la porra. Por ahora, es una fiesta que genera más polémica que buen rollo. Al Amargazo les remito.

Otra para mosquearte el viernes: Zerolo y su ayuntamiento reconocen que la campaña de publicidad sobre el lío de Las Teresitas la pagó Obrascom, empresa adjudicataria de la fanfarria reformadora. ¿Mande? Esto... vamos a ver. La campaña aparecía bajo el sello de Gerencia de Urbanismo. Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Que uno recuerde, no aparecía el logotipo de las empresas adjudicatarias por ningún lado.
¿Es ésta una práctica común? Porque entonces resultará que es Alstom quien paga las campañas del tranvía o las empresas farmacéuticas quienes financian las campañas de sanidad. Si esto es normal, es que entramos en otra definitiva pervesión más del sistema democrático, una más en el devenir de Coalición Canaria. La formación ¿política?, por cierto, ya está inmersa en su follón de campañitas confusas preelectorales, como esa que se vanagloria de tener a 21.000 sanitarios en Canarias, logro propio de Coalición y nada más que de Coalición. Todo eso con un desastre sanitario de aúpa, hace falta ser hipócrita.
Mientras tanto, Zerolo sigue muerto de la risa y amenazando con querellas con otro nuevo asunto: la privatización de Enmasa. En este tema, por lo que sé, la empresa adjudicataria también podría contar cuatro cosas al respecto, y cuatro cosas malas. Así que la sonrisa de Zerolo ni se sabe hasta dónde puede llegar.
Por cierto, una chorrada. Si en Las Teresitas no se va a edificar, ¿cómo es que va a ser una playa urbana? Playa urbana, sí, otra trola que sumar a un conjunto de mentiras.

Pues a pesar de arrancar el viernes con semejantes dosis de buen rollo, el estómago se me puso mejor. Después, por la noche, pusieron Farenheit 9/11, con lo que aumentó la mala hostia de uno, a lo que se suma la noticia de este lobby vinculado con el señor Bush, míster Diablo (hay que darle a la razón a Chávez, todo lo que toca Bush hijo lo destroza) ofrece dinero a científicos para que le quiten peso al cambio climático, justo después de otro informe demoledor al respecto.

Pero tengo el sistema digestivo perfectamente recuperado. Por tanto, la realidad sana, cura y da esplendor.

Buenos días y perdón por el rollo.

4 comentarios:

alejandrosl dijo...

Y nadie se ha preguntado a quién beneficia el susodicho Amargazo? Mientras corren ríos de tinta sobre tal chorrada, cada vez se habla menos de cierto alcalde al que se le ha puesto una querella. Pero en esta Tenerife tan surrealista no me extrañaría que el próximo capítulo sea alguien pidiendo que se vote a Coalición Canaria para evitar que traigan a nadie de fuera para robarnos nuestra fiesta. Pasen y vean.

Job dijo...

Tú lo has dicho, Pinzón. Aquí mientras no se hable de lo que importa, hablaremos de las chorradas del momento. Y encima acaba de comenzar el concurso de murgas.

Anónimo dijo...

De rollo nada, majete.
Si en esta campaña que se sabía polémica se reconoce que la paga Obrascón o como se llame, cómo será el mamoneo de las campañas preelectorales, cuántos favores a devolver...
Por cierto, no estaría de más una contra-campaña, con preguntas y respuestas reales del tipo:
¿puede un señor con sueldo de 120000 ptas recibir un crédito de 5 millones de euros?
¿Es lícito que un señor se apruebe a sí mismo un crédito "dudoso" por dicho importe?
¿porqué un ayuntamiento paga un sobreprecio por algo que además ya es suyo parcialmente?
¿porqué tantas prisas en todo el proceso (constitución de la sociedad compradora, aprobación de crédito, tramites administrativos municipales?
Y los humildes empresarios ¿cuántos puestos de trabajo han creado con esta operación?

Y sobre todo ¿de qué coño se rie Zerolo?

La podría financiar Amid Achid, todavía despechado por el rechazo de Plasencia, Ignacio y Ambrosio a entrar en la compra de terrenos de Geneto.

Sólo una idea.
Por cierto, Bambones muy bien en la primera fase (ojo al primer tema). Se reconcilia uno con las murgas..


Bienvenido Job.

El Gran Guanajo.

Anónimo dijo...

El Carnaval sigue con la implicación de Adán Martín en una investigación por corrupción. ¿Quién necesita el Carnaval para divertirse, si ya tenemos a estos pájaros?